Desde su fundación en 1996 por los visionarios doctores Jorge Tricio y David Rosenberg, la Clínica CIPO ha sido mucho más que una institución odontológica en Santiago de Chile. Nació del sueño compartido de ofrecer no solo tratamientos de vanguardia en periodoncia y oseointegración, sino también una experiencia cálida y humana para cada paciente.

Jorge Tricio y David Rosenberg, ambos egresados destacados de la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica, trajeron consigo un bagaje de conocimiento y pasión por la odontología que transformó CIPO en un referente de excelencia en Latinoamérica. Su compromiso con la innovación y la calidad se refleja en cada aspecto de la clínica, desde el diseño de los tratamientos hasta el ambiente acogedor que reciben sus pacientes.

CIPO no solo ofrece atención dental personalizada, sino que también busca cambiar la percepción tradicional de la visita al dentista. En lugar de solo cuidar los dientes, la clínica se dedica a cuidar a las personas, creando una experiencia que no solo alivia, sino que también reconforta.

Hoy, bajo la dirección del apasionado Dr. David Rosenberg, CIPO continúa su legado de excelencia y humanidad. A través de años de investigación y colaboración académica en la Universidad de los Andes, el Dr. Rosenberg ha liderado avances significativos en el campo de la odontología y la biotecnología, elevando los estándares de cuidado oral en Chile.

Desde sus humildes inicios hasta convertirse en una institución de renombre, CIPO ha sido más que una clínica: ha sido un refugio para aquellos que buscan no solo mejorar su salud dental, sino también encontrar tranquilidad y confianza en cada visita.

Para conocer más sobre cómo CIPO continúa marcando la diferencia en la vida de sus pacientes, te invitamos a explorar su historia y servicios en persona. Déjanos cuidar de tu sonrisa mientras cuidamos de ti.